Los desiertos son lugares áridos. La mayoría de los desiertos reciben menos de diez pulgadas de lluvia al año.
Algunos desiertos son tan áridos que nada puede crecer allí. En otros desiertos, las plantas tienen formas de obtener el agua que necesitan. Algunos almacenan agua en sus tallos, de esa manera tienen agua incluso cuando no llueve. Otras plantas tienen raíces largas. Para llegar al agua, las raíces crecen profundamente bajo la tierra.