Las personas deciden a diario en qué gastar. Dedican gran parte de sus ingresos para cosas que necesitan.
Las personas pagan para vivir en sus hogares. Ellas compran comida y ropa. También gastan dinero en cosas que quieren, como una bicicleta nueva o boletos para el cine. También pueden compartir su dinero y donarlo a grupos y fundaciones sin fines de lucro que ayudan a otros.
Incluso pueden decidir ahorrar parte de sus ingresos. Es posible que guarden sus ahorros en un banco. O pueden invertirlos. Cuando las personas hacen una inversión, están comprando algo que esperan que suba de valor con el tiempo.