Los países de toda Europa buscaban construir tantas colonias como pudieran. Las colonias significaban riquezas y poder para los monarcas y para quienes les eran leales.
Las empresas de Europa también querían hacer negocios en las colonias. Algunas personas querían la libertad de practicar la religión a su manera. Otros querían riqueza y poder. Estas diversas motivaciones llevaron al crecimiento de cuatro Colonias Medias que pronto florecieron.