El boicot a los autobuses de Montgomery hizo famoso a King. Estaba muy ocupado.
Ayudó a formar una nueva organización, la Conferencia de liderazgo cristiano del Sur (Southern Christian Leadership Conference, SCLC). Se dedicaba a trabajar por los derechos civiles y, él se convirtió en su líder. También escribió un libro sobre el boicot. Mientras firmaba ejemplares de su libro en una librería de la Ciudad de Nueva York, una mujer con trastornos mentales le clavó un abrecartas en el pecho. Su doctor le dijo que si hubiera estornudado, habría podido morir. El ataque ayudó a King a comprender que tenía enemigos y que podrían matarlo.