¿Cuánto estarías dispuesto a arriesgar por tu país? Los exploradores europeos estaban dispuestos a arriesgarlo todo. No disponían de mucha información.
La travesía era siempre peligrosa. Se podían perder. Los barcos podían naufragar debido a las tormentas. La tripulación se podía enfermar. Aun así, el deseo por llegar a regiones remotas del mundo no los detenía. Venían en busca de riqueza, fama y aventura. También buscaban la gloria para ellos mismos y sus países. Con frecuencia, monarcas en busca de nuevas rutas de comercio, más recursos naturales y nuevos territorios alrededor del mundo, financiaban o auspiciaban las travesías. Muchos exploradores europeos buscaban propagar la fe cristiana. Lo consideraban un deber sagrado.
Por estas razones, se vio navegar uno tras otro a exploradores desde mediados del siglo XV y hasta mediados del siglo XVI. Esto fue el comienzo de la Era de los Descubrimientos, un período que cambió para siempre el curso de la historia humana.