“Ninguna Constitución es igual en el papel y en la vida”, * escribió el gobernador Morris de Pensilvania quien redactó el borrador final de la Constitución. Morris quiso decir que las palabras en el papel no cambian, pero la vida sí. El mundo cambia.
Por ejemplo, los autores no podían imaginar la televisión o el internet. ¿Cómo debía aplicarse la libertad de prensa a esos medios? Los nueve jueces de la Corte Suprema tienen el trabajo de interpretar la Constitución en un mundo cambiante, deciden si los actos del Congreso y del presidente están permitidos por la Constitución; esto se llama revisión judicial.