En 1863, durante la Guerra Civil, el presidente Abraham Lincoln firmó la Proclamación de la Emancipación.
Este documento liberó a la gente esclavizada en los estados del Sur que seguían en guerra. En 1865, la Decimotercera (13. °) Enmienda a la Constitución de los EE. UU. abolió la esclavitud en el resto del país. La Decimocuarta (14. °) Enmienda fue aprobada en 1868, concedió la ciudadanía a los afroestadounidenses. La Decimoquinta (15. °) Enmienda, en 1870, dio a los afroestadounidenses el derecho al voto. La Ley de los Derechos Civiles de 1875, señalaba que no se les podía prohibir a los afroestadounidenses entrar en lugares públicos como hoteles y teatros. Durante algún tiempo, estas leyes ayudaron a los afroestadounidenses. Pero las leyes eran ignoradas cada vez más. La segregación se convirtió en la ley no escrita del país.

▲ ¿Cómo justificaron los esclavistas el trato cruel que daban a las personas esclavizadas? Tenían que convencerse a sí mismos de que las personas esclavizadas eran menos humanas que las personas blancas y, que las personas blancas eran superiores, o mejores. Dicha idea se llama “supremacía blanca”. No tiene ninguna base en la realidad. Incluso era el motor de la segregación después de la Guerra Civil.
La Reconstrucción es el período después de la Guerra Civil. Las tropas federales tomaron posesión del Sur para proteger los derechos de las personas esclavizadas recientemente liberadas. Desde la Reconstrucción hasta 1901, los votantes enviaron a 22 representantes afroestadounidenses al Congreso de los EE. UU. Algunos afroestadounidenses abrieron exitosos negocios y granjas. Pero el gobierno no dio a las personas que habían sido esclavizadas la ayuda económica ni los terrenos que les habían prometido. La mayoría tenía pocas esperanzas de ganar más dinero. Abrieron escuelas para las personas liberadas de la esclavitud, como esta (más arriba) en Charleston, Carolina del Sur. ▼

◀ En 1877, el gobierno estadou-nidense había sacado a sus tropas del Sur. Esto hizo que los ex esclavistas gobernaran a los afroestadounidenses liberados. Los estados del Sur aprobaron lo que se conocía como las leyes Jim Crow. Estas leyes apoyaban la segregación y dejaron a los afroestadounidenses sin el derecho al voto.
Después de la Guerra Civil, los supremacistas blancos empezaron olas de violencia callejera. Los miembros de estos grupos mentían y culpaban a los afroestadounidenses de haber cometido crímenes. A los afroestadounidenses los linchaban y los mataban, por lo general los ahorcaban, tras condenarlos a muerte ilegalmente. Grupos terroristas racistas, como el Ku Klux Klan, estaban detrás de los asesinatos y bombardeos durante la Era de los Derechos Civiles. ▶


▲ Dos conocidos líderes afroestadounidenses tenían ideas muy distintas sobre la segregación. Booker T. Washington (1856–1915), arriba a la izquierda, nació bajo la esclavitud. Fundó la Universidad Tuskegee en Alabama. Él creía que los afroestadounidenses debían aceptar la segregación y trabajar para aprovechar al máximo su papel en la sociedad. W. E. B. Du Bois (1868–1963), a la derecha, nació en el Norte. Él creía que los afroestadounidenses debían exigir igualdad en todos los aspectos de la vida. En 1909, Du Bois ayudó a formar la Asociación Nacional para el Desarrollo de la Gente de Color (National Association for the Advancement of Colored People o NAACP, por sus siglas en inglés). La NAACP fue una de las primeras organizaciones de derechos civiles.


▲ Con el paso de los años, muchos afroestadounidenses se fueron a buscar trabajo al norte del país. La mayoría acabó viviendo en barrios abarrotados en zonas marginales. Tenían trabajos que pagaban poco y no tenían muchas oportunidades de salir adelante. La segregación no era ley en el Norte, pero también existía. A veces pedían a los compradores de viviendas de raza blanca que firmaran acuerdos en los que decía que no revenderían sus casas a afroestadounidenses. El alojamiento segregado significaba que las iglesias, escuelas y otras instituciones locales también estaban separadas por raza. En donde no segregaban a los afroestadounidenses, a menudo les negaban ciertos puestos de trabajo. No podían entrar en algunos restaurantes ni en otros edificios públicos.